CUADROS CON PAPEL DE ARROZ

El papel de arroz es un papel impreso muy fino y en esta ocasión vamos a trabajar con él utilizando la técnica de decoupage tal y como lo hacemos con las servilletas de papel.

En la manualidad de hoy vamos a hacer unos dos cuadros con dos láminas de papel de arroz de 21 x 29,7 centímetros, para ello vamos a utilizar como soporte en vez de dos marcos, dos tablas de balsa cogiendo como referencia las medidas del papel de arroz y aumentándole un centímetro mas, tanto en la parte superior, inferior y los lados.

Una vez que tenemos las tablas de madera cortadas en esas medidas, las pintamos con una pintura clara, porque el papel de arroz debe estar pegado en una superficie clara, de lo contrario se oscurecería la imagen. En este caso la pinté con pintura a la tiza de un tono blanco roto.

Cuando la pintura esté seca, aplicamos por toda la superficie de la tabla cola especial para decoupage con ayuda de un pincel plano y extendemos bien. Lo podéis ver en la siguiente fotografía:

Seguidamente colocamos el papel de arroz encima de la tabla, bien centrada, comprobando que quede el centímetro que habíamos dejado de margen en cada uno de los lados, y la pegamos ayudándonos de una esponja, desde el centro hacia los lados con mucho cuidado de que el papel no se rompa ni que queden grumos. La esponja es de mucha ayuda cuando la superficie a pegar, como en este caso, es amplia.

Una vez pegada y seca, le damos una mano de cola especial para decoupage finish encima de todo el papel de arroz. Esto servirá de capa protectora para que no se deteriore.

Ahora vamos a envejecer la madera que queda al aire con una cera natural en pasta, en este caso utilicé color nogal.

Comenzamos utilizando el mismo pincel plano que hemos utilizado, mojandolo en la cera natural y tiñendo el canto de la madera. Cuando nos quede poca cera en el pincel, lo limpiamos en la tabla, consiguiendo así oscurecerla. Podéis practicar en la parte trasera de la madera para evitar estropear el frente. Poco a poco, con paciencia vamos tiñendo todo el canto con bastante cantidad de cera y con poca el frente de la madera. En la siguiente fotografía podéis ver un cuadro envejecido y el otro sin envejecer para que podáis apreciar la diferencia:

A continuación os presento una fotografía de nuestra manualidad para decorar finalizada, los dos cuadros envejecidos y sujetos en la pared con cinta de doble cara para no hacer agujeros en la pared.

Ahora podréis ver  con detalle cada uno de los cuadros:

Espero que os guste y gracias por estar ahí.